BIOY CASARES, MI CÍNICO PREFERIDO

Aquí, en la Calle 52, tenemos debilidad por Bioy, no sólo por la lucidez y el juego onírico de su obra, que todos conocemos, sino también por el encanto de su descaro y la valentía de sus placeres.

Durante más de cincuenta años, desde 1947 y hasta poco antes de su muerte, Adolfo Bioy Casares registró la memoria de sus días y sus opiniones acerca de sí mismo y de su círculo, primero en diarios de entradas cotidianas, después en cuadernos de apuntes que "no siguen el orden del calendario". Fue el mismo Bioy quien decidió reunirlos bajo el título común de Descanso de caminantes.

Esta noche en la Calle 52 nos hacemos un lugar en la intimidad de uno de los hombres más brillantes de la literatura, para conocer los detalles del imaginario y del mundo sensible de Adolfo Bioy Casares.

Pueden escuchar el programa bajando los cuatro links aquí:

Bloque 1 http://www.mediafire.com/?c5gmjfatu1i

Bloque 2 http://www.mediafire.com/?wc0dsntzo4k

Bloque 3 http://www.mediafire.com/?yyb4thzk11w

Bloque 4 http://www.mediafire.com/?kjcdj0jxyhg

Promo http://www.mediafire.com/?iyzmi901xgp

Algunos apuntes de Descanso de Caminantes, el diario de Adolfo Bioy Casares:


“Acostumbrarse a que la suerte de quien más nos importa, no importe un pito a gente que nos acompaña y nos quiere”.

3 marzo 1988

“Murió Beatriz Guido. Una de las personas más auténticamente encantadoras que conocí, inteligente, viva, buena, mentirosa impenitente y desorbitada, graciosa, cariñosa. Dijo que si escribía una nota sobre una de sus novelas, se acostaría conmigo. La escribí y nos acostamos, riendo de la situación”.

22 de marzo de 1985

“Reporte de la experiencia ¿Compartir a una mujer? ¿Por qué no? Lo verdaderamente desagradable es compartir un cuarto de baño”.


No olviden dejar comentarios o enviar mails a miguelgarciaurbani@gmail.com